Últimas noticias sobre la música

El usuario en el hogar concibe el ocio en Internet como una actividad gratuita, en la que no es necesario pagar para disfrutar de los juegos, de la música o de las películas. Por eso es buena noticia que por fin una empresa dedicada a la industria de la música se haya decidido a probar la viabilidad de un proyecto en la red.

No se trata de música gratuita en la red, ni mucho menos, sino una exploración a través de las posibilidades que ofrece ese invento llamado Internet. Por lo visto, la gente se descarga música gratis...

En serio, parece mentira que ahora estén dándose cuenta de que el negocio ha cambiado y NADIE (el nombre usado por Ulises para huir de Polifemo) pagará por algo que puede obtener gratuitamente. Que no me hablen de estrategias competitivas y diferenciadoras: el precio manda hasta que se demuestre lo contrario (marca, posicionamiento, servicio posventa,...)

Más sobre fútbol televisado

Primero fue la Liga de fútbol profesional. Ahora el Sevilla FC.

La televisión está cambiando a marchas forzadas el panorama audiovisual español por varias razones.

La primera y más sangrante es la Ley 21/1997, de 3 de julio, reguladora de las Emisiones y Retransmisiones de Competiciones y Acontecimientos Deportivos, cuyo artículo 5.1. declara que "en el supuesto de las competiciones deportivas de Liga o Copa, se considerará de interés general un encuentro por cada jornada, que deberá ser retransmitido en directo, en abierto, y para todo el territorio del Estado, siempre que haya algún operador o programador interesado en hacerlo". En aquel año se realizó una "ley contra", esto es, no por el interés general sino para desbaratar la creación de un creciente monopolio audiovisual. Como todas las leyes contra, tiene numerosos fallos y recovecos que acaban perjudicando más al legislador y, por ende al ciudadano, que a aquel a quien se pretende fastidiar.

El segundo grupo de ineptos los encontramos en la LFP. Los derechos audiovisuales son fuente de riqueza para la televisión y la negociación (la tercera que yo recuerdo) es cada vez peor. Si los clubes deportivos y las sociedades anónimas se pusieran de acuerdo, obtendrían más dinero para todos por el único contenido premium auténticamente válido para todas las cadenas generalistas (aunque algunas lo nieguen) y el único contenido de arrastre para los operadores de pago. Son los clubes quienes tienen la sartén por el mango... hasta que deciden fragmentar las negociaciones en varios tramos.

Entonces aparece el Sevilla FC y, en su derecho, decide que no admite dinero de la televisión y que no se emiten partidos. ¿En su derecho? Según la citada ley, podría ser de interés público y estar obligado. Además, los presuntos derechos no son exclusivos, porque - última noticia - en el fútbol juegan dos.

Estas reflexiones me duelen más cuando acabo de ver a la selección de baloncesto arrasar a Lituania en el Mundial de Baloncesto. Si recibieran la mitad de la atención que merecen... No creo que el fútbol mate la gallina de los huevos de oro, pero lo mismo pensaron los gestores de la ACB - ¿alguien conoce a alguien que alguna vez haya visto un partido ACB en la TV? - o la Vuelta a España...

La TDT local en Andalucía

Leo en la prensa de hoy que el PP está muy preocupado porque, según parece, el PSOE controlará dos tercios de las televisiones municipales andaluzas.

En efecto, el problema que se deduce de la información es que los partidos políticos creen que las empresas municipales o las entidades públicas son chiringuitos que se pueden utilizar al antojo de cada cual. Supongo que si ambas partes, que dominan el panorama municipal andaluz, se pusieran de acuerdo no habría tanta manipulación, propaganda y telebasura como auguro.

Lástima que sigamos desperdiciando oportunidades para profundizar en la democracia...

PD. Aunque expresamente prohibida, apuesto que más de un canal se hará "en colaboración" con empresas periodísticas privadas. Es que soy un adivino...

Una selección de lecturas digitales

Últimamente buceo bastante por Internet y he encontrado varios blogs interesantes para periodistas. Descubro, sin asombro pero sin terminar de aceptarlo fácilmente, que la mayoría de las bitácoras hispanas comparten contenidos y análisis.

Me gusta que compartamos intereses (eso es la esencia del periodismo 2.0.), pero me asusta que veamos las cosas de formas tan similares.


Una primera selección es la siguiente:

- Azul Carmona

- José Manuel Noguera

- Txetxu Barandiarán

- Julio Alonso

y por supuesto Eduardo Punset

PD. Que nadie pregunte cómo he llegado hasta ellos porque la red... es así.

La crisis de verdad

La credibilidad del periódico es su mayor intangible. Es la base de su trabajo cotidiano y responde a la confianza que tiene depositada el lector cuando cada mañana se acerca al quiosco.

En los últimos años, los medios de comunicación, sobre todo la prensa escrita, han perdido esa confianza. Las equivocaciones y las inexactitudes, la falta de preparación y/o de tiempo disponible para temas sensibles, el abuso de las fuentes anónimas o no atribuidas, el peso de la ideología del medio en la información, la ausencia de rectificaciones de verdad (esto es, que después de la disculpa no se vuelva a cometer el error de nuevo) y la falta de ética, entre otras, genera una espiral de desconfianza y desazón. El fenómeno no es nuevo, pero ahora alcanza unas cotas desconocidas. Cuando a comienzos de los ochenta The Washington Post devolvió el Pulitzer otorgado a Janet Cooke por inventarse un reportaje sobre un menor de ocho años adicto a la heroína, el escándalo no tuvo tanto impacto en la credibilidad. Un fallo lo podía tener cualquiera.

En España, según los datos publicados en el Informe anual sobre la profesión periodística 2005, la televisión es el medio que goza de mayor credibilidad (33,4%) por delante de la radio (30,7%) y la prensa escrita (23,6%). “Lo he visto en la tele” es una sentencia demoledora cuando se trata de razonar una información. Internet está muy retrasado con sólo el 5,5%. Destaca el hecho de que las noticias políticas consiguen poca o ninguna confianza (77,4%) seguida de las financieras y las de negocios (59,9%). La prensa es más valorada por aquellos grupos de población de mayor edad y por los de mayor nivel socioeconómico y cultural. La televisión ofrece una relación inversamente proporcional. En Estados Unidos, la última encuesta publicada por USA Today, CNN y Gallup muestra que sólo 36% de los ciudadanos cree que los medios informan correctamente. Se confirma la tendencia a la baja desde 1989, coincidiendo con la caída de la URSS, cuando el índice se situaba en el 54%. El momento más bajo alcanzar se dio poco después del desconcierto de las elecciones presidenciales de 2000 y el escándalo de Florida. Como contrapunto, crece el interés por los medios satíricos. El éxito del semanario The Onion (tres millones de visitantes cada semana) y del Daily Show del cómico televisivo Jon Stewart revelan el hastío de los jóvenes. La tendencia es generalizada en todo el mundo.

¿Por qué no hay tropas ya en Líbano?

"In the past, when peacekeeping missions were not properly defined, we have seen major failures. There are the bad memories of Bosnia. This time we want the answers beforehand."
- AGNHS ROMATET, a spokeswoman for the French Foreign Ministry, on problems recruiting a peacekeeping force for Lebanon.

La cita original se encuentra aquí, pero es de $.

Se puede decir más alto, pero no más claro.